
Hoy, 8 de diciembre, se celebra la fiesta de la Inmaculada Concepción, un dogma de la Iglesia católica que proclama que la Virgen María fue preservada del pecado original desde el primer instante de su concepción. Este dogma tiene una gran importancia para los cristianos, ya que nos recuerda que María es la Madre de Dios y que, por tanto, es una figura de especial santidad y pureza.